La adaptación consta de un triciclo sin pedales que se le han modificado las ruedas, adaptado otras más y se le ha montado un yeso.
«La adaptación es rápida y sencilla. Simplemente se desmontan las ruedas que trae la bicicleta y se aprovechan para la parte trasera, ya que llevan rodamiento para eje de 12, que es más robusto. Hacemos los agujeros originales un poco más grandes y pasamos una varilla roscada. Esta varilla se recubre con un tubo de hierro hueco como embellecedor. En los extremos, además de las arandelas, colocamos unas tuercas con freno para conseguir que las ruedas giren libres.
Para la parte de adelante, compramos unas ruedas para eje de 8. El procedimiento es el mismo que para las ruedas de atrás, pero no hace falta agrandar agujeros en el chasis, ya que utilizamos como eje varilla roscada de 8 mm.
Por último, aunque la nena mantiene bien el equilibrio, para asegurarnos que se puede desplazar sin supervisión, quitamos el asiento y colocamos una tabla con el lecho de escayola atornillada a la misma.
De esta forma, asegurándola con la cincha, la podemos dejar libre para que se mueva por casa.»
¡Y el resultado es espectacular!
Enhorabuena Jesús por la adaptación y muchas gracias por compartirla.
Os dejamos links de compras del material:
Podéis contactar con Jesús en el teléfono: +34 601 00 97 79